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Sacerdotisas del amor

Por Manumitida
Sacerdotisas

Mi joven amante es 17 años más joven que yo.
Podría tener las mujeres que quisiera, mujeres a las que los hombres de mi edad seguirían con la mirada. Y sin embargo está aquí, en mi cama. Dice que le resulta muy fácil acostarse con cualquier chavala, todo el mundo folla hoy día, pero, como muy bien dice Houellebecq, nadie se entrega. Y las consecuencias son terribles: perdemos el interés por el sexo.

Muazzez Ilmiye Cig, arqueóloga turca, pasó muchas horas de su vida descifrando tablillas, y descubrió que, mucho antes de Mahoma, las mujeres sumerias que llevaban velo eran prostitutas o sacerdotisas que iniciaban a los/las (depende de las fuentes) jóvenes en el sexo.

Mi joven amante es muy inquieto, es un chico culto, le gusta hablar, escuchar, hacerse preguntas, sopesar respuestas. Está sediento de aprender, de compartir, de crecer. Le preocupa mucho, como a Houellebecq y a mí, la degradación moral de Occidente, la crisis de egoísmo que nos recorre. Y me digo que no sería justo desaprovechar mi experiencia, no enseñarle lo que a mí me ha costado tanto aprender, no mostrarle que el sexo es vida; que nada puede compararse a la felicidad de entregarse a los demás.

Quizá Occidente esté más necesitado de sacerdotisas que nunca.

0 respuestas a «Sacerdotisas del amor»

¿Le dijiste a tu joven amante cuántas veces pasaste de largo por esto del sexo hasta lograr esa… tu gran experiencia?
A veces la inexperiencia… descubre grandes cosas en la vida…

(Ahh… no sería mala idea montar una academia con esas sacerdotisas)

Yo conocí a una mujer española que me dijo que su arquetipo es la prostituta sagrada.
Me contó que su sueño era montar una escuela de sacerdotisas del sexo tántrico.
Yo, fascinado, quise ser su discípulo pero descubrí que en realidad tenía un gran complejo de mujer fatal porque su padre abusó de ella.
¿Pueden las mujeres occidentales contemporáneas superar sus traumas y sus mitos para entregarse al culto de Eros sin reservas?
¿Pueden enseñarnos a los hombres algo sobre el sexo sin pedirnos que seamos su príncipe azul y/o su paño de lágrimas?

Antonio, te has quedado anticuado: ahora son los hombres los que quieren que seamos princesas. Nada asusta más a un hombre adulto (no hablo de los jóvenes) que una mujer independiente que no necesita colgarse de él, que se levantará de su cama y seguirá con su vida.

Hombre, lógicamente hablo de solteros, de gente que corre los mismos riesgos. Un hombre casado que busque aventuras con mujeres independientes no necesita que las amantes se cuelguen de él porque para eso ya tiene a la mujercita en casa.

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