Texto: Carmen K. Salmerón.
Foto: Manugón.
– 1 cola de rape congelada, de 200 gr. por comensal.
– 1 bolsa de coles de bruselas de 500 gr. Congelada.
– 100 gramos de almendras crudas con piel.
– 3 dientes de ajo.
– Aceite de oliva virgen extra.
– Sal yodada.
En una bandeja de horno, colocamos las colas de rape. Previamente las habremos dejado descongelar la noche anterior. Salpimentamos por encima. Les echamos un chorrito de aceite de oliva virgen extra. Las dejamos en el horno a 170º unos 8 minutos. Mientras tanto, freímos las almendras en una sartén con poco aceite. En cuanto van cambiando de color, menos de 1 minuto, las sacamos de la sartén y las colocamos en un almirez. Freímos los ajos pelados y partidos por la mitad en la misma sartén (apenas unos 30 segundos, para que no se quemen y, por tanto, amarguen. Bastantes amarguras trae ya la vida. Los adjuntamos a las almendras, junto con una pizca de sal. Majamos bien con la mano del almirez. Nuestro bíceps y las pailas gustativas nos lo agradecerán. Reservamos.
Vamos con las coles: en una perolita ponemos 1 l. De agua. Llevamos a ebullición. Echamos una pizca de sal, removemos con cuchara de palo y vertemos el contenido de la bolsa de las coles congeladas. 5 minutos de cocción son suficientes. Aún así, no está demás leer las indicaciones del fabricante, por si las moscas. Una vez hervidas, las echamos en un escurre verduras. Puedes reservar el agua para hacer con ella una sopa en otra ocasión.
Ahora llega el momento de la magia: emplatar con gracia, para que la primera seducción sea la visual. Colocamos la cola en un lado del plato. En el otro, empezamos a hacer la torre con las coles. Ponemos 5 de base, arriba 3 y coronamos con una. Vertemos el majado por encima y a la mesa, a dejar a los comensales “ojopláticos”.
PROPIEDADES
Ya sabemos que el rape es un pescado de una carne blanca exquisita. Altamente digestivo. El ajo, es el mejor antibiótico natural que existe en la naturaleza. Mejora la circulación, aliviando la pesadez de las varices, entre otras múltiples propiedades que seguiremos viendo en otras recetas. Las almendras son ricas en proteínas e hidratos de carbono, así como en vitaminas del grupo B. Fortalecen el sistema nervioso, tan anémico en esta sociedad de aparente opulencia. El aceite de oliva virgen extra, el obtenido de la primera prensada de la aceituna, en inmensamente rico en fenoles. Estas sustancias inhiben una proteína presente en el cáncer de mama, convirtiendo al aceite en un anticancerígeno tan potente, o más, como los medicamentos a base de trastuzumab o lapatinib. Este descubrimiento acaba de ser recientemente publicado. Quede para la posteridad: diciembre de 2008.