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General Ya os vale

¡Elena, olé!

por Robert Lozinski

No sé si es de buen o mal gusto que una ministra se ponga en una rueda de prensa un vestido llevado en un desfile de moda pocos días antes. Y que luzca también joyería cara y tacones, altísimos y puntiagudos, en las reuniones de trabajo.

La apariencia glamourosa de Elena Udrea, ministra rumana del Desarrollo Regional y Turismo, impresiona y escandaliza. En el país de Drácula, la gente es inocente y piensa con el corazón; una mujer ministra es en primer lugar eso, mujer a quien se le perdonan esa clase de deslices, escotes abruptos, pantalones o vestidos muy pegados al cuerpo, cabellos teñidos de vistoso rubio platino.

E buna! (íEstá buena!), ríe el rumano enseñando mucho los dientes.

La foto de la guapa ministra, vestida de Dolce & Gabanna –más de 14 mil libras, dicen las malas lenguas, le habrá costado el género- llegó a los periódicos estadounidenses. En los Estados Unidos esas horteradas se castigan duramente. A un político –o política- se le suele criticar públicamente si el precio de lo que viste está por encima del sueldo medio de un norteamericano.

En algunos de los Estados Unidos de Europa no es así. La pinta de un político parece que debe ser el espejo de las aspiraciones más elementales del populacho; enriquecerse a cualquier precio. Ella lo ha conseguido, ¡olé!. Todos ellos lo han conseguido. Se han enriquecido a precio de la ruina de su pueblo.

Fueron más listos que tú y yo, dice el rumano en tono entre serio y chistoso, y se quita el sombrero.

(Nota de la editora: Robert me mandó un vídeo, pero no he sido capaz de colgarlo, para verlo, pincha aquí)

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Robert Lozinski es autor de La ruleta chechena

2 respuestas a «¡Elena, olé!»

Pues parece que los rumanos tienen bastante en común con los españoles.
Aquí el más listo es el que coge más días de baja, que el más se escaquea, el que sólo trabaja cuando mira el jefe…

Trabajar por el bien común debería ser un buen aliciente para los políticos. Pero esta visto que el dinero se ha impuesto a cualquier otro valor.
Lo siento por los rumanos.

Me quiero follar esta hembra, que está bien guapa ¿Cómo hago? ¿Alguien puede darme el celular de Elena Udrea? Ya he estudiado rumano, he ahorrado, me sometí a un tratamiento físico para ponerme en forma. Y tengo los boletos aéreos para ir hasta Bucarest o adonde se encuentre esta golfa del poder. Le he comprado un collar de perlas. Ahora necesito un contacto con esa mina.

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