por Marisol Oviaño La profesión de lector conlleva una pérdida de la inocencia: cuanta más experiencia acumulas, más difícil resulta encontrar libros que te emocionen. A la postre somos yonquis buscando la pureza que nos lleve al más revelador viaje: esa voz única, ese personaje arrebatador, ese poema que nos deja con las patas colgando… […]