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Adicciones General Ya os vale

prohibir, prohibir, prohibir

por nidiosniamo

He pasado muchas horas de mi vida en bares, como trabajador y como cliente, y puedo decir sin temor a equivocarme que los bares son el hábitat del fumador.

El parroquiano por antonomasia es un tipo que fuma y bebe. Por eso en los bares venden tabaco, que comercializa y grava el Estado, y las estanterías están llenas de botellas de alcohol y no de cajitas de tofu e infusiones.

Desde que decidí vivir al margen, cada vez me afectan menos las leyes de la nueva ingeniería social, yo no dejaré de ir a los bares porque hayan prohibido fumar en ellos, dejé de ir hace mucho tiempo porque nadie tiene pasta: mis clientes remolonean a la hora de pagar, tengo que trabajar por la mitad y todo es mucho más caro.
Ahora fumo tabaco de liar y bebo en casa, que es más barato.

La ley antitabaco me afecta poco o nada, pero como hago seguimiento de todas las estrategias del Gobierno para enfrentarnos a unos con otros -ateos contra religiosos, perdedores de la Guerra Civil contra ganadores, nacionalistas con españolistas, controladores contra gente que no llega a fin de mes, fumadores contra no fumadores- sigo los comentarios de la gente en los medios.

Y leo muchos del tipo: por fin podré ir con mis niños al bar.
El sueño que todo dueño de bar y todo parroquiano había deseado siempre: niños correteando entre las banquetas de la barra, niños que se pegan, niños que gritan, niños que te tiran sin querer –ya estás pidiendo perdón a este señor– la Cocacola encima, madres que gritan histéricas o que pasan de todo…
No, señora mía.
Al bar se va a beber y fumar, del mismo modo que al puticlub se va a follar, al casino a jugar, a la biblioteca a leer y al gimnasio a hacer pesas. Para los niños ya están los parques, los programas de la tele y la playstation.

Leo también comentarios que hablan de lo que cuestan los fumadores a la SS (pero no hablan de lo que el Estado recauda gracias a ellos, dato curioso).
Yo tengo 47 años, soy fumador y bebedor y he olvidado la última vez que pisé la consulta de un medico.
Sin embargo, me faltan dedos en las manos y los pies para contar las veces que mis amigos, los sanos deportistas, han estado de baja (esto es, cobrando de la SS) porque se han lesionado montando en biclicleta, jugando al pádel, esquiando… Ellos vivirán probablemente más años que yo, es decir: vivirán mucho más tiempo a costa del Estado y, mientras, atestarán los hoteles de Benidorm (a cuenta del IMSERSO) y las consultas, quirófanos y camas de la seguridad social.

Estudios recientes han demostrado que resulta que todos nos morimos. Los que fuman y los que no. Y los viejos sanos son los que más tardan en morirse. Si no, que se lo pregunten a mi abuelo, que tiene 95 años y lleva 10 diciéndole a los médicos que él lo único que quiere es morirse porque ya se aburre. Que, si lo llega a saber, no habría dejado de fumar a los 50.

Leo comentarios de hosteleros: siguen esperando las hordas de antifumadores (no confundir con los no fumadores) que iban a abarrotar los bares. Ya se propuso antes: bares para fumadores y para antifumadores . Y resultó que los antifumadores no van a bares, del mismo modo que los parroquianos de los bares no van a los gimnasios.
La diferencia está en que a los fumadores no les ocurriría pedir que en todos los gimnasios haya una barra para tomarse una cerveza y fumarse un cigarrito.

Estoy de acuerdo en que se prohiba fumar en todos los sitios a los que uno no tiene más remedio que ir: lugar de trabajo, ministerios, hospitales, escuelas… Pero a los bares uno va porque quiere.

En mi barrio hay dos bares para gays.
Y yo, como soy heterosexual, no voy porque ya sé lo que hay.
También hay un bar para pensionistas.
Y yo, como soy un hombre en edad de trabajar, tampoco voy.
Si hubiera habido un bar para no fumadores, jamás se me habría ocurrido entrar y encenderme un cigarrito.
Pero no lo había. Cuando el Gobierno empezó a ponerse tonto con el tabaco -como si no premiaran a los más leales haciéndoles consejeros de Tabacalera- un hostelero puso el cartel de «espacio sin humos» y a los tres meses lo quitó, porque con lo que consumían los antifumadores no le llegaba ni para pagar los impuestos. Y como los antifumadores no eran negocio, volvió a permitir que todo el mundo fumara, y el bar volvió a llenarse.

Ahora el pueblo está repleto de bares vacíos.
La única clientela que tienen está en las terrazas, fumando junto a las setas de calor.

0 respuestas a «prohibir, prohibir, prohibir»

Totalmente de acuerdo contigo, y encima tenemos que aguantar la propaganda a través de la TVE y otras cadenas saliendo la presunta madre con el presunto bebé suyo diciendo que por fin puede ir a los bares con el crío. Los niños a respirar aire puro a El Retiro y los adultos a donde nos de la gana. Estoy harta de tanta propaganda del gobierno que nos trata como imbéciles.
Yo si que estoy mosqueada con esta estúpida ley, que por mi propia decisión soy fumadora social, que me había quitado a mi misma la costumbre de fumar sola y me esperaba a fumar en compañía en los bares porque me saben mejor las bebidas con alcohol si van acompañadas del pitillo, ¿y cómo tener una conversación con un café sin el cigarrillo? Ahora si que me han hecho polvo, si odiaba a los 14 años fumar en el baño del colegio a escondidas, lo de ahora me mata.

en mi barrio están las terrazas llenas de fumadores y no fumadores. Los últimos se tienen que salir fuera si no quieren quedarse hablando solos.

Un 10 por este artículo. En realidad, no es que a los de izquierdas les encante prohibir: es que los que disfrutan prohibiendo se sienten irresistiblemente atraídos por la izquierda. Es su hábitat natural. ¿Es la izquierda un residuo del catolicismo medieval, con su Inquisición, sus Cruzadas, sus herejes y sus infieles? Pues no lo sé pero, la verdad, se le parece mucho.

1. El éxito de esta nueva cortina de humo -nunca mejor dicho- ha sido total. Terrorismo y leyes chorras, lo que más entretiene al populacho.
2. La escenita cómplice del cigarrito culpable en la puerta del bar es un contexto óptimo para pegar la hebra y acabar arrimando cebolleta, algo bueno debía tener. Al final la gente no va a ir a pillar a la discoteca sino a la puerta de la discoteca.

Este tema me involucra mucho y me cuesta hablar del mismo aún. Fui hasta hasta hace 4 años fumadora «empedernida» (opuesta a lo social).Adicta al tabaco. Mientras lo era, sufri todo tipo de persecuciones, censura social, familar, laboral ,consejos imperativos, sugerencias malignas y profecias de todo tipo. Pasé x todas las experiencias, cuando incluso comiamos fuera, al aire libre, «los no fumadores» levantaban sus narices hacia otra dirección y me dejaban de lado, ni la distancia los hacia mas indulgentes. Dejo de fumar x una decisión personal en mi caso, «providencial» (juro que despues de un chequeo muy normal, con un medico clinico excelente y nada presionador, o sea decisión: personalísima). Pasan seis meses y en la segunda visita me toca un mal diagnostico, operación inmediata,Dios hace que esa imagen maligna se extirpara (con absoluta positividad hasta hoy, y sin pasar x nada posterior agresivo, salvo la intervención quirurgica,experiencia x la cual nunca habia pasado y no es grata))-Tengo los pies en la tierra y no volvi nunca mas a fumar. Me costó muchisimo. Pero no voy a olvidar el sistema represivo de cuando para mi fumar era un paraiso, y yo un pobre diablo sufriente oliendo a tabaco. Sigo entendiendo a la gente que lo hace y lo disfruta, y lo padece y cava «catacumbas» para ocultar su goce. Este es mi caso, odio la palabra «prohibir»,mi historia es anécdota. Susana ( una mujer argentina.

Los antifumadores han esgrimido aquello de «tu libertad acaba donde empieza la mía».
Y aquí está la madre del cordero.
Los antifumadores se han salido con la suya: los fumadores ya no pueden fumar en los bares. Durante el día, esto no supone demasiado problema.
Pero ¿qué pasará por las noches?
Todos los que viven cerca de un bar de copas, saben que, aunque los bares estén insonorizados, por la noche hay mucho ruido por la gente que sale y entra hablando, cantando, gritando…

A partir de ahora, quienes vivan cerca de bares de copas no podrán pegar ojo, porque todos los fumadores estarán en la calle fumando y charlando a las tantas de la madrugada (toda la población adulta condenada también al botellón). Está demostrado que no poder dormir es malísimo para la salud y para la calidad de vida. Y yo me pregunto: ¿qué salud es la más importante: la de los antifumadores o la de la gente que necesita dormir?
¿No sería más lógico que se permitiera fumar en los bares a partir de, digamos, las diez de la noche, para que todos los mortales, fumadores y no fumadores, puedan dormir?

«Ahora fumo cuatro veces menos, me canso menos al subir las escaleras, me ahorro un dinerito en ambientador para el salón, y mi marido me hace el amor más veces porque tengo mejor aliento» Fdo: Mi compañera de trabajo a las 15:06 minutos

Pecador: pues que ahora llegue alguien a contarnos lo buena que es su vida desde que dejó de beber y que prohiban la cerveza en todos los bares.
Después, que alguien cuente lo bien que se encuentra desde que dejó de comer grasas y que prohiban los torreznos.
¿Sigo?

Nuca he fumado, y nunca me ha molestado la gente que fuma. Mi opinión está manchada con la nicotina del fumador pasivo, pero si muero de cancer de pulmón no demandaré a los diez millones de fumadores españoles, y lo asumiré como una putada más de la vida.

Lo que me gusta de esta ley, aprte de que mi ropa no apesta a humo, es que la gente ha demostrado ser más cívica de lo que parece. Y en general, se asume la ley con bastante naturalidad.

Lo que aborrezco es que el gobierno se meta en lo que es bueno o malo para el individuo. Menos prohibir y más trabajar.

Si en España hay más no fumadores que fumadores, es campaña electoral. Si no es campaña electoral, debe ser otra cosa. Pobre España, otra vez dividida en dos bandos. Zapatero, qué tío.

Me gustaría felicitarle por el artículo, ha expresado exactamente todo lo que pienso acerca de esta nueva Ley.
En donde yo vivo, una ciudad pequeña del norte, también abrieron con la anterior Ley un bar de no fumadores que a los 2 meses se volvió a cambier de bando porque no le iba nadie.
Es un Ley contra la libertad individual, el derecho de admisión de los bares, es contradictoria, con mala técnica legislativa… las tiene todas.
Pero lo más preocupante para mí es esas legiones de antifumadores radicales que se dedican a salir a dar rondas por la ciudad con el único objetivo de ver una mínima infracción de la Ley y denunciarla. ¡Qué ni siquiera van a los bares a consumir, que van a denunciar! Además de jactarse del frío que pasan ahora los fumadores en la terraza. Estas pseudopersonas tienen un foro en la página web NOFUMADORES.ORG que os animo a que visiteis para aunque solo sea ver lo bajo y rastrero que puede caer el ser humano. Y estos son con los que presionaron, entre otras pseuasociaciones de esta calaña para que tengamos esta ley tan restrictiva.
Un saludo y nos vemos en los clubs de fumadores.

Gracias por la información, Festivalera.
Me he pasado por el foro de nofumadores.org y la verdad, da miedo esa gente. Es como si todos los antifumadores (no confundir con los no fumadores) hubieran sentido una llamada divina para unirse a una cobarde cruzada en la que lo mejor es que no hay que dar la cara ni correr riesgos, se nota que les pone cachondos el papel de delatores anónimos.
Ya podían ponerse a denunciar a los políticos, que son su verdadero problema.

No se me ocurre mejor manera de pasar el tiempo libre buscando infractores y poniendo denuncias, un planazo, vamos. Estos pobres seres que todavía no saben que van a morir, como un fumador, deben llevar una vida muy aburrida. Lo malo es que nos la quieren imponer a todos, porque no se conformarán con que no fumemos en los bares.

Desde luego, no seré yo quien deje de fumar: trabajar hasta los 67 y vivir hasta los 90 rodeado de miembros de la Santa Inquisición de la Salud. Menuda juerga.

Desde luego, este gobierno de Zapatero, no sabe ya q hacer para q nos olvidemos de lo realmente importante en España,el paro,el terrorismo,los inmigrantes q cobran sin trabajar, ynosotros los españolitos de a pie, trbajando muchos toda la vida, van al paro, y se acaba y q quien da de comer a sus hijos?colegios?medicos?nadie,porque se lo dan a esos extranjeros q vienen a vivir de gorra,claro, por eso nos jubilaremos más tarde,eso si nos jubilamos,personas con incapacidades realmente importantes,que han cotizado y reciben pensiones de risa,sin ayudas apenas, en fin,que nos desvían cosas que tendríamos q estar todos a una. Yo no fumo, tengo un hijo con problemas de laringe y pulmones, pero no por ello dejo de ir a los bares, ni a casa de mi suegra,que fuma, no entramos en sitios cargados por ese tema, pero hay más sitios,no me parece bien que nos dividan, mi suegrita, por ejemplo, queda fuera,nosotros dentro, y que hablamos por señas??jejje, tiene gracia. Me parece bien en un hospital, en un colegio, pero en un parque, que no molesta, un bar, por DIos, unámonos para ser un pais España, y no varios, tener un Ley, no varias y sin sentido, ZP, dejanos en paz, q vamos a tenernos q marchar, o moriremos en el intento.

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