por Manumitida
Me he acostado a las cinco de la mañana, y ando un poco espesa después de la fiesta en la que la Comandante Inar de Solange y el Ejército del Futuro salieron de la clandestinidad virtual para invadir el mundo real.
Gracias a todos lo que estuvisteis allí apoyando como un solo hombre.
Nunca pensé que unos aplausos pudieran arropar tanto.
David todavía no me ha mandado las fotos, así que, aquellos que no estuvisteis en la presentación, tendréis que esperar para verlas. Aunque me temo que el fotógrafo estaba liado haciendo el video (algún día lo editaremos) y que sólo serán fotos de gente que se abraza muy sonriente.
Mientras, podéis hacer boca con el video que proyectamos en una de las paredes.
El video es obra de el Deiviz.
Elige tú qué música ponerle, no tiene audio, no quiero líos con la SGAE.
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No estuvo mal la presentación del libro, algún micrófono, no hubiera estado de más.
Lo siento por Inag de Solange, yo, nunca me incorporaré a las filas de ningún ejército: estoy en contra de ellos: ¡la imaginación kontra el poder, siempre kontra el poder!, jejeje.
Abraciños (me faltó, por ejemplo, la invitación a una cervecita por lo menos, jajaja).
Pero… si invitaron a una cerveza… A una nada más, pero sí invitaron. A lo mejor ya no les quedaban tickets cuando llegaste.
Yo me lo pasé muy bien, me divertí, compré un libro, empecé a leerlo anoche y tuve que obligarme a apagar la luz y dormir un poco para no leerlo de un tirón. Me está gustando mucho
Ya a finales de los 90 escribió Augusto Roa Bastos:
«EL SIGLO XXI SERÁ FEMENINO.»
Adelante pues.
El sol de Fuerteventura es tan intenso que parece mentira estar a finales de octubre ante esta luz que se rompe sobre si misma- Escribo desde el fin del mundo pero las luces y las sombras de estos últimos días, tan intensos, tan apasionante permanecen en mi retina. Madrid, Fuerteventura. En el recuerdo, los nervios de Antonio y su contundente discurso encaramado a una silla creo, o sí no a alguna tarima misteriosa, las luces urbanas de una noche de presentacion y fiesta, la emoción de Marisol y la de tanta gente que apoya con sonrisas con vítores con aliento de gente que no traga con el sistema y sabe decirlo, que no, que no vamos a morir ni tampoco a callarnos, la lectura de Carmen, las mil doscientas birras, el vestidito negro tras traducir en Banco de España. ellos, los que controlan todo menos los aplausos sentidos que vivimos en la presentación de Seduciendo a Dios…a ellos, los bancos, nadie les aplaude así….
Gracias por el momento gracias por Proscritos
Ines al otro lado del sol