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El mito Manson-Tate cumple otro año

Miguel Pérez de Lema

Como cada agosto, reverdece con su aniversario uno de los grandes mitos contemporáneos: el asesinato de la actriz Sharon Tate a manos de los seguidores de Charlie Manson. Un asunto al que uno ha dedicado, sin saber muy bien por qué, muchas horas y del que hemos hablado por aquí ya más de una vez. En este aniversario de la matanza que acabó con la inocencia de América, me permito la autocita, trayendo al blog la reseña que publiqué hace algún tiempo en nuestra primera etapa de «Proscritos LaRevista», sobre un espléndido libro español que narra aquellos sucesos.
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LITERATURA > RARA AVIS
La ejecución de Sharon Tate o la mística del crimen
por Miguel Pérez de Lema

Autor: Manuel A. Penella.
Editorial: Círculo de Amigos de la Historia (1976).

Venimos a esta sección de rarezas y descubrimientos con un libro sorprendente y, con casi toda seguridad, olvidado. No sabemos nada de su autor, Manuel A. Penella (puede haber publicado más libros, o no) y lo hemos encontrado en una colección titulada Los grandes procesos de la historia de la que tampoco sabemos nada más, ni qué otros títulos publicaría.

Este libro es un reportaje novelado y destacadísimo ejemplo del género de no ficción en español, que recrea la lisérgica, apasionante y horrible biografía del icono contemporáneo del mal, Charles Manson, y su carrera criminal. Partiendo de la minuciosa descripción de la ´ejecución` de Sharon Tate (esposa del director de cine Roman Polanski) en su mansión de Bel Air, junto a sus compañeros de velada, que sacudió los cimientos de Hollywood y despertó a la sociedad americana del dulce sueño del flower power, el libro es una apasionante narración de las maquinaciones del gurú maléfico y su poder de seducción.

La literatura surge, a veces, donde menos se espera. Probablemente este libro no fuera concebido con grandes aspiraciones artísticas, pero es una de las novelas más apasionantes que he leído. El estilo no rehuye del género pulp y la crónica de sucesos, pero es de una eficacia irrefutable. Sabe perfectamente lo que quiere contar, conoce hasta el mínimo detalle de los sucesos y transmite el horror, el desconcierto y la fascinación del caso con la mayor intensidad. Es el tipo de libro que hace al lector replantearse a qué llamamos literatura, por qué hay tanta prosa insustancial, insignificante, inane, presentada bajo el sello de literatura sin que nos asalte la desconfianza, mientras un libro como éste, que apasiona, conmueve y hace reflexionar, tiene menos pedigrí.

A los lectores fatigados les conviene leer un libro como éste, en el que la vida está vivísima y el autor no duda en emplear el material de la realidad para construir potentísima literatura de género. Ha procesado los materiales de la realidad para tratar de explicarla y comprenderla con precisión de forense, a la vez que con el talento ha construido una novela en la que se conjugan varios géneros para potenciar el interés de los sucesos, su carga dramática, su hondura psicológica, su valor sociológico. ¿No es eso literatura?

Las andanzas de Manson, tal como se relatan, constituyen una mística del crimen en la que el lector va siendo seducido al mismo tiempo que se desvelan los trucos de aquel pobre hombre, un psicópata con delirios de grandeza y un complejo de inferioridad tan agudo que acaba desmontando el mito, a la vez que aumenta la fascinación del caso. Penella consigue embarcar al lector en la disparatada, atroz y apasionante ´familia`, el grupo que lidera Manson, como un anticristo escondido en lo más árido del desierto americano mientras ordena ejecutar sus delirantes planes para provocar el colapso de la civilización.

Lo que apasiona no son los crímenes, sino el delirante plan para cambiar el mundo que encerraban, y cómo pudo ser posible que alguien llegara a tener tal poder de manipulación como para que tres jovencitas cometieran tales atrocidades y siguieran sonriendo hasta el día del juicio en que se las condenó a cadena perpetua (allí siguen).

Aunque no se escatima la sangre (el gran cine casi siempre rebosa sangre y nadie se escandaliza), lo que importa y emociona de este libro es la recreación del ambiente psicológico que Manson infunde en los que le rodean. La ´lucidez` de su locura, que embauca y amedrenta , y que convierte a unos hippies tontos en la secta de los hachissins contemporáneos. El arte Pop no es el reflejo de lo superficial, sino la forma brillante de mostrar de forma superficial los mitos más profundos, y en este libro comprendemos que Manson encarna un arquetipo del mal universal e intemporal. El lector llega a comprender los mecanismos del delirio del protagonista, con el que no llega nunca a comulgar, dejando también algún que otro cabo suelto que aumenta el verismo de la narración.

Ahora que la figura del psicópata vende tantos libros, tenemos el placer de haber encontrado la pequeña obra maestra del subgénero. Y le brindamos a los editores avispados el soplo, en pos de su reedición.
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Bola extra
En anteriores posts ya hemos revindicado el legado musical de Manson. Hoy sometemos a juicio del lector las dos versiones del «Cease to exist», la canción escrita por Charlie que Dennis Wilson robó-versionó con sus Beach Boys y grabó con el rebajado título «Never learn not to love». La de los Beach Boys es una superproducción bastante modosa y relamida aunque con la brillantez de esa época de la banda. Ojalá existieran grabaciones de los recitales interminables con que Manson animaba la veladas de la «Familia», donde el pequeño manipulador usaba este tema, en alucinantes e interminables variaciones, como inductor al estado alterado de conciencia del grupo -un estado ya de por sí más que alterado y adulterado por el LSD, la marihuana, y el culto al líder carismático-. Pero nos tenemos que conformar con esta grabación precaria de Charlie, de su primer y mítico album taleguero «Lie». Que ustedes las disfruten.

Charlie

Dennis
http://youtu.be/W2KiLsi5ZEc

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