Categorías
General Recetas proscritas

CREMA ATARDECER DE MELÓN (Postre)

Por Carmen K. Salmerón. 2008.
melon1.jpg

fotografía en contexto original:ac-guadeloupe

¡Oh, tú, melón, alimento mágico, caprichoso y procaz, que en la mañana sana y por la noche mata!
Una vez ejecutada nuestra faceta aduladora con esta oración al melón, queda garantizada la ausencia de apretón y retortijón.
Ingredientes para unas 6 personas:
– 1/2 melón más bien maduro, sin cáscara ni pepitas, de unos 700 u 800 gramos.
– 2 cucharadas soperas de azúcar.
– 1 paquete pequeño de nata para cocinar.
– 1 copa generosa de brandy.

Calentamos en un cazo a fuego fuerte el brandy y el azúcar. Cuando alcanza el punto de ebullición, bajamos el fuego al mínimo, removemos con cuchara de palo (como siempre ha de ser) y mantenemos unos 10’. Transcurrido este tiempo, retiramos del fuego y dejamos enfriar. Mientras tanto, quitamos la piel del melón, lo hacemos trozos, lo metemos en un recipiente que permita introducir batidora e ingredientes en su justa medida, para garantizar que nada saldrá propulsado, como si del cometa Halley se tratara). Bien, una vez garantizado esto (se puede usar a modo de vaso de batidora una cacerolita con capacidad para 2 litros), introducimos en el recipiente los trozos del melón y la nata. Batimos bien hasta conseguir la apariencia de un líquido espeso (lo conseguimos en apenas unos segundos). Si quedara demasiado espeso, aligeramos añadiendo un chorrito de leche. (Aténgase el cocinero al significado literal de “chorrito”. Si en lugar de chorrito propinamos una inundación, tipo cataratas de Iguazú, tenga claro el lector que arruinará el postre. ¡O también podría ser que inventara otro!). Una vez obtenido el líquido espeso, le añadimos el brandy azucarado y templado. Mezclamos bien. Servimos en cuencos. Metemos en el frigorífico al menos una hora antes de ser consumido. Adornamos cada cuenco con un trozo de cáscara de melón con forma de flor de 5 pétalos, que dibujaremos nosotros mismos sobre la cáscara y recortaremos. Clavamos una por cuenco. No te quepa duda de que sorprenderemos con este arrebato creativo a nuestros invitados, incluidas suegras y cuñadas.

PROPIEDADES:
El melón carece de grasa. Su energía procede de los hidratos de carbono que, en la fruta, se llama fructosa. Cuanto más maduro esté, más concentración de fructosa alcanza, con lo que será más dulce al paladar. Posee alta concentración de carotenoides, lo que nos asegura propiedades antioxidantes (¡arrugas fuera!). También cuenta con ignamos, sustancias protectoras frente al cáncer y enfermedades cardíacas.