por mujerabasedebien
Fotografía en contexto original: blogdepeter
Lagarto pasa el invierno hibernando y pensando en la muerte.
Cuando llega la primavera, su sangre empieza a bullir, sale de su guarida y se tumba sobre una piedra, al sol. A medida que su cuerpo se va calentando, la vida comienza a agitarse en él, y entonces saldrá a buscar hembras con las que aparearse.
Y aquí estoy yo, en las rocas.
Esperando que venga a cubrirme una primavera más.