Feliz Navidad

por Marisol Oviaño

Me despierto el día de Nochebuena pensando en bombillas: hay una fundida en el salón y otra en la cocina.

– Que no se nos olvide comprarlas, o mañana tendremos que comer con velas.

Este año no vamos a la casa que mi madre tiene en el pueblo. Se ha estropeado la caldera y no han podido arreglarla a tiempo y, además, no está mal variar de vez en cuando; cenaremos todos en Madrid, en casa de mi hermana. Y mañana vendrán todos a comer aquí.

El teléfono parpadea avisando de que hay un mensaje que ha llegado mientras dormía. Es una foto que me envían desde un número desconocido. La imagen estará borrosa hasta que la descargue, y en la pantalla hay un aviso de que podría tratarse de spam. Pero reconozco entre la bruma a el hombre que vive al filo y le doy a descargar. Es un primer plano sonriente y, tras él, un templo de algún país asiático. También hay un escueto mensaje: “Un beso, Marisol”. Mi corazoncito late cálido en esta mañana fría.

Guardo su número en la agenda del móvil, contesto a su guasap y me meto en la ducha. Cuando salgo, tengo otro, esta vez de el hombre en la sombra. También él me ha mandado una imagen. Hará cosa de un mes le di una vieja carpeta con la maldita novela en la que he estado trabajando ocho años para que la leyera. Sabía que estaba liadísimo y que no tendría tiempo de leerla inmediatamente, pero necesitaba alejarla de mí y saber que estaba en sus manos. Además, si algo me ha enseñado la vida es a esperar.

Ayer me llamó desde el tren que le devolvía a su tierra, y no quise preguntarle si había metido la maldita novela en el equipaje. Hoy me felicita la Navidad con una foto que ha hecho en el dormitorio de su infancia: un primer plano de la carpeta abierta. Ay, qué bien, se la ha llevado para leerla estos días. Mi corazoncito aletea de alegría. Contesto a su mensaje y regreso a mi habitación a vestirme.

En el salón suena otro guasap. Mi madre: un meme para sugerir que esta noche no nos enzarcemos a discutir de política. No puedo evitar una sonrisa y me sumo al plan, tengamos la fiesta en paz.

Feliz Navidad a todos.