Un negrazo tipo Omar Sy me manda un flechazo desde Francia:
mi fantasía está a miles de kilómetros y sólo habla francés.
Nadie me habla en el idioma que tú me hablas.
Un simpático mando intermedio quiere pegar la hebra conmigo.
Está a diez minutos en coche, pero me aburre.
Nadie me hace pensar como tú.
Tuyo es el único tacto que mi piel añora,
tuyo mi primer pensamiento algunas mañanas
tuyas las sonrisas que me provoca pensar en ti.
Pero hemos elegido la guerra, y esto es lo que hay.
Amarte es hermoso y difícil,
la excusa perfecta para no renunciar a mi árida libertad.
Le envío un flechazo al negro de mis fantasías
y cierro el chat.