por Marisol Oviaño
La vida tiene momentos muy hermosos.
Hace un par de días colgué lo que me sucedió en la estación de Renfe de Córdoba, pero eso no fue lo único bueno que me pasó ese viernes.
Antes había estado participando en una mesa redonda sobre literatura, internet y la disolución del autor con Vicente Luis Mora -poeta, narrador, profundísimo crítico literario y director del Instituto Cervantes de Marrakech- y Pedro Ruiz Pérez, catedrático de Literatura Española, profesor e investigador apasionado y entregado, en el Aula Magna de la facultad de Filosofía y Letras de la de la Universidad de Córdoba.
La charla estuvo muy animada, los que estábamos en la mesa lo pasamos bien y supongo que también quienes nos escuchaban, porque nadie se marchó, algunos se atrevieron a hacer preguntas –España, patria del absurdo sentido del ridículo-, y cuando Pedro dio por concluida la mesa redonda, nos aplaudieron un buen rato.
El rector, otro hombre entregado a la enseñanza, nos felicitó personalmente y nos dijo que le había gustado mucho –más tarde volvería a reiterarlo en el hermoso patio de la facultad-. También los profesores se acercaron a la mesa y estrecharon nuestras manos con bastante entusiasmo (no sé si lo hacen siempre, fue mi primer Aula Magna).
Pero quienes me tocaron la fibra sensible fueron las tres muchachas de la fotografía y el chaval que estaba al otro lado de la cámara. Esperaron a que las autoridades académicas se retiraran para acercarse tímidamente a mí y preguntarme si podían hacerse una foto conmigo y si, además, podían hacerme preguntas sobre Seduciendo a dios que no se habían atrevido a hacer públicamente.
Estos pequeños momentos hacen que todo sacrificio y esfuerzo cobre sentido.
Mis jóvenes lectores lograron que me sintiera semilla arrojada en buena tierra.
De izquierda a derecha: Eva Luque Torres, Sensi Budia Juárez, Marisol Oviaño y Alba Frías Luna. Al otro lado de la cámara, Paco Romero.
2 respuestas a «Posando en Córdoba»
¿Este año no vienes por nuestra facultad? Lo que hemos entrado este curso estaríamos encantados de que nos visitaras para hablar de Seduciendo a dios.
Un saludo.
Si vuestra universidad me invita, iré encantada a hablar con vosotros sobre Seduciendo a dios.