Descontroladores

Por más que he leído y escuchado noticias periodísticas, no he conseguido enterarme de lo que realmente sucedió ayer. Siguiendo una ya larga tradición, los periodistas españoles o hablan de oído o repiten la voz de su amo. En este momento, leída ya la mitad del último libro de Mario Conde, la inocencia del Gobierno me parece la posibilidad más remota. Aunque me temo que, si no queremos caer en la paranoia crónica, con esto tendremos que vivir: así es, si así os parece.

He seguido leyendo.
Pego aquí una carta publicada en el blog de una controladora:
«Porque me estáis escribiendo cosas de flipar:

Anónimo dice que no se lo cree, me parece cojonudo. Es lo que hay. En lugar de leer los periódicos pagados por el gobierno lee el Boletín Oficial del Estado, ahí está todo y luego decides lo que te crees y lo que no.

Otro dice que vivimos en un estado de derecho. Pues va a ser que no. El primer decreto ley que nos cascaron anuló nuestro derecho a la negociación colectiva violando la Constitución. Pues ahí está.

Me abren dos expedientes disciplinarios por escribir una mariconada de blog. Tengo dos juicios pendientes, que cada cosa que vosotros tenéis por ley yo tengo que ganarla en los tribunales y eso si tengo suerte, que si no me jodo, porque soy controladora y no se me aplica ni de coña la misma justicia que a vosotros lo creáis o no.

Mis huelgas las pactan sindicatos en los que no hay ni un controlador y me nombran servicios mínimos del 120%. Si eso es tener derecho a la huelga que baje dios y lo vea.

Ponemos a la opinión pública en nuestra contra: mentira, siempre lo ha estado porque nadie se ha molestado en escuchar los argumentos y datos que llevamos dando un año. Sólo oyeron 360.000 y no pasaron de ahí.

¿Para qué cojones creéis que nos han cascado tres decretazos y una orden ministerial?

En el primero nos ampliaron la jornada por el morro en seiscientas horas al año, que está de puta madre.

Nos crujieron el sueldo y resulta que todos sabéis lo que yo gano porque lo dicen en la tele. Pues tampoco es verdad ni por los cojones. No gano 200.000 euros al año por mucho que diga el ministro. Ni eso ni la mitad.

Si os molestaseis en mirar mejor, veríais que hace nada la directora de navegación aérea se soltó el moño diciendo que pedíamos más dinero saliendo de una reunión de la que existe un acta en la que no figura semejante petición. Un juez la obliga a retractarse, pero vosotros sólo oís lo que os da la gana. Y somos los malos para variar. Y de éstas hay mil.

Hemos presentado cientos de demandas por incidentes de seguridad, por irregularidades de todos los calibres. Van a parar al fondo de un cajón. Estamos recurriendo a tribunales europeos porque lo de España es el coño de la Bernarda.

En el segundo decretazo nos quitaron los descansos y se concedieron barra libre para ponernos a currar como animales y nos obligan a estar disponibles 365 días al año, 24 horas al día. Esto se lo comento a los médicos que me dicen gilipolleces, que ninguno curra todos los días.

Me obligaron a trabajar doscientas horas al mes a turnos de mañana, tarde y noche. Y para el subnormal que dice que trabajo como todo el mundo 40 horas a la semana, eso son 160. O sea, que yo trabajo el equivalente a cinco semanas en un mes de cuatro, cuando por ser trabajo a turnos debería currar bastante menos.

Al que le salga de los huevos que se lea cualquier estudio del efecto del trabajo a turnos sobre el organismo. La mitad de los que me ponéis a caldo dormís mal dos días y estáis hechos una mierda. Yo llevo haciendo turnos sin rechistar catorce putos años, así que no me jodáis.

Y es muy fácil imaginar mi curro desde vuestros sofás, durmiendo ocho horitas cada noche. Si venís a currar conmigo a turnos un mes en una semana no podéis con vuestros huevos.

No somos controladores suficientes, y es lo que hay. No damos abasto coño. No os queréis enterar. Nos exigís currar todos los días para tener vuestros putos puentes y vuestras putas vacaciones. ¿Dónde cojones dice que seamos vuestros esclavos? ¿Por qué vosotros tenéis todos los derechos del mundo y nosotros NINGUNO?

A pesar de que nos aumentaron un huevo las horas, como los de AENA son unos inútiles nos hicieron currar como putas en verano y se quedaron sin sus propias putas horas. Y yo no puedo trabajar por encima de lo que estipula la ley porque me meten en la cárcel.

Solución: otro decretazo, el de hoy, que hace desaparecer vacaciones, bajas, permisos, reducciones de jornada por maternidad etc y así salen horas por un tubo. Y con efecto retroactivo, que ya es para cagarse.

Vuestro puente de puta madre, y yo curro dieciséis meses al año.

Me decís que pobrecitos vuestros parientes, que no podéis ir a verlos. Yo he tenido UN fin de semana libre en nueve putos meses. Han operado a mi madre tres veces y la he visto cinco días.
Y os atrevéis a decirme que vuestras familias son más importantes que la mía.

Y ahora viene la mierda de los militares. Somos dos mil civiles, y no hay ni doscientos controladores militares aprovechables para hacer nuestro trabajo. Controlar no es conducir, y para que un militar haga mi curro tiene que saberse mi espacio aéreo, mis procedimientos, la geografía de mi zona de pe a pa. O sea, que necesita un par de mesecitos o más. Sin contar con que yo muevo sesenta aviones a la hora y ellos no pillan ni la cuarta parte. Por no decir que van tiesos de inglés para vuelos comerciales.

O lo de que me hacen a mí militar por sus cojones. A mí y a su puta madre, porque en ese preciso instante le clavo al militar mi contrato en el fusilito y que se enchufe él. Lo que me faltaba ya para el duro.

¿Es seguro volar con control militar? Cuando hayan recibido la formación correspondiente lo será. Ahora mismo ni de coña.

El que quiera ser un esclavo que lo sea, no me contéis que vuestros curros son peores, espabilad y luchad en lugar de lloriquear, pero yo defiendo el último derecho que me queda, que es el de pelear por recuperar mis derechos (lo que vosotros llamáis privilegios, que manda huevos) y mi dignidad profesional y personal.

Y si lo consigo bien y si no me largo del curro. Haceos controladores vosotros y así os curráis los puentes unos a otros y tan ricamente. Os va a encantar.

Mola que sólo a una persona le haya llamado la atención que en todo este tiempo no se haya oído a los controladores. No nos dejan hablar en la tele ni salir en los periódicos porque al Gobierno no le interesa que se conozca nuestra versión. Sólo tenéis la suya.

Y no sé de dónde coño os sacáis todos el derecho a juzgarme, condenarme e insultarme si ni sabéis lo que hago ni quién coño soy.

Ya os vale a todos. Le pido al cielo de rodillas que agún día os caiga encima toda la mierda que me está cayendo y que me estáis soltando a mí. Ese día hablaremos de tú a tú y ya veréis qué bien nos entendemos».

Copiado de: controladoresyotrashierbas

Yo sigo con lo mío.
He seguido leyendo y leyendo y he llegado a la conclusión de que los controladores son el botón de muestra de lo que va a suceder cuando empiecen a conculcar derechos a todos los colectivos.

El Gobierno quiere dar sensación de firmeza apagando un fuego que él mismo ha encendido. Los controladores son el chivo expiatorio perfecto: ganan mucha pasta. Y los españoles, enardecidos porque se viola su sacrosanto derecho al puente -parafraseando a otro de los comentaristas del blog-, aplaudimos a las fuerzas armadas cuando entran en los aeropuertos. (Que por cierto, los controladores militares no pueden controlar vuelos civiles porque Defensa no ha renovado su licencia , todo es de traca en este asunto)

Una vez más, tengo la sensación de que el aparato de propaganda del PSOE ha vuelto a ganarle la partida a este país de borregos, que aplaude cuando se empiezan a llevar a los primeros al matadero.
Da miedo.

Sí, se quejan mucho. Y, si es cierto que ellos son los responsables de que no haya más controladores (ya no me fío de las versiones de nadie), serán tan responsables del problema como Aena y el Gobierno, que son los que a mí me dan miedo. Más que los controladores.

No suelo participar en los debates de este blog, más por santa pereza (soy un vago redomado a la hora de escribir, lo reconozco) que por falta de ganas; pero si me encanta leeros: a veces, de tanto manotear en el agua turbia, conseguís hacernos ver el fondo del bacín. Pero esta vez no he podido resistir la tentación.

Yo trabajo en el aeropuerto de Barajas, en un departamento técnico de la, hasta hace unos pocos años, llamada Compañía de Bandera (mucho me temo que para demasiados españoles otro demonio de siete colas). Y sí, como dice Marisol (quiero creer que con benévolo retintín, más que con verdadera acritud), soy de esos que aún tienen pagas extras, vacaciones y bajas pagadas –al paso que vamos quedaremos tan pocos que a lo mejor tenemos que empezar a pedir perdón–. Y Por supuesto, mi sueldo no se acerca ni por asomo al de un controlador, ya quisiera yo. Pero sí tengo unas condiciones laborales parecidas a ellos en lo que respecta a turnos (mañana, tarde y noche los 365 días del año, ni me acuerdo ya cuando fueron las últimas navidades que pasé con mi familia), aunque en lo referente al cómputo de horas anual creo que estamos algo mejor. Como decía Durrenmatt, cuando se tiene que empezar a explicar lo evidente, es que estamos al borde del fin. Llevo 25 años en el sector aéreo y creo que conozco un poco el tema –alguna conversación con algún controlador amigo, sí, no muerden, hay gente encantadora, me ha ayudado a entender medianamente el asunto– y el tema de fondo, lo verdaderamente importante de todo este despropósito, es la privatización del espacio aéreo español. Que un área tan estratégica de la seguridad y la economía de un país caiga en manos privadas es el principio del fin señores; piensen por un momento, vista la debacle financiera provocada por bancos y gestores económicos, en cómo sería la gestión de ese espacio con criterios exclusivamente depredadores, relativizando la seguridad en mor de unos dígitos más en la cuenta de resultados, caiga quien caiga (nunca mejor dicho).
Otra cuestión, los salarios de los controladores no salen del dinero de todos los españoles, se remuneran con los beneficios de AENA. Esta entidad generaba unos beneficios de miles de millones, una parte para sueldos, otra para mantenerse y la más importante para las arcas del Estado. Y he dicho que generaba por que desgraciadamente de un tiempo para acá ya no lo hace. Se invirtieron 800000 mil millones de euros en infraestructuras que han dado como resultado sus números rojos. Curiosamente las empresas adjudicatarias de dichas inversiones siempre eran las mismas, y mas curiosamente en una de ellas ostentando la titularidad la familia de Don José Blanco.
Una cuestión más, en los últimos 10 años el tráfico aéreo a aumentado en más de un 30% y la plantilla sigue siendo la misma. Hace 6 años se convocaron 150 plazas para cubrir las jubilaciones, al día de hoy los aprobados siguen sin recibir el acta de ingreso. Y no es verdad que el acceso esté en manos de los controladores, de dónde se ha sacado eso, ¿desde cúando unas oposiciones a un cuerpo del Estado está en poder de sus trabajadores?
Y por último, ahí están los lobos americanos y los ingleses deseando tirarse al cuello de nuestra querida presa espacial. No les falta mucho para saltar.
Sinceramente, si aún nos quedara dignidad, lo que han hecho los controladores deberíamos hacerlo todos los españoles de una puñetera vez.

Salud, camaradas.

Los economistas enterados dicen que nos van a intervenir, sí o sí.
Los más alarmistas dicen que habrá hostias por la comida.

Estamos en estado de alarma, pero ya no tengo tan claro que sea por el tema del espacio aéreo.

Un tipo en Olot mata a sus jefes, que le deben pasta y que le pagan con un talón sin fondos. Para quitárselo de encima, seguramente.
Y después se van tan tranquilitos a tomar unas cañas o a comer. Porque el tipo no los ha matado cuando estaban trabajando: los ha matado en un bar. La gente que no tiene dinero, no va a los bares. Si no puedes pagar a tus empleados, no puedes ir a bares. No puedes firmarle un talón sin fondos a un tío que ha currado 20 años para ti (malo en lo suyo no sería) e irte después tan tranquilito a tomar algo.
Eso debía pensar el Pere, que se presentó en el bar y les dio matarile.
Rematados los jefes, se va al banco y le pega dos tiros a dos empleados.

La prensa, que depende de políticos y bancos, dice que estaba loco.
Ya.

Pero estamos en estado de alarma y el gobierno quiere retirar de circulación 800.000 armas. l No he leído las excusas gubernamentales, será por el bien de los animales, o de las mujeres, o de los homosexuales de Ruanda.
Pero a mí me da que es para que no haya 800000 Peres Puigs.

¡Pero coño, Ningúnotro, si nos has salido un talibán de la ortografía! Está muy bien, hay que estar siempre vigilante y mi error es más que evidente, desde aquí mis disculpas por el lapsus línguae: las altas horas de la noche, la rápidez en la escritura, el cabreo por la situación relatada, etc, etc, etc. Siempre viendo la paja en el ojo ajeno; pero aplícate el cuento tú también, joder: «Además, ¡que carajo!, esta es tu casa…», «que» se acentúa siempre que sea interrogativo, admirativo, dubitativo, en sentido distributivo o ponderativo (línea 8, comentario 14 a «Elegí un mal día»). Uno más: «Imagínate lo que deben estar pensando en estos momentos los estadounidenses de su servicio diplomático solamente porque el amigo Julian les está dando caña ahora a ellos específicamente.» (2º párrafo del comentario 15 a «Elegí un mal día») ¡Ajjj!, una coma, por favor, que me ahogo. Prefiero no seguir. Sólo espero que no fuera una sutil forma de anular mi discurso por un simple desliz ortográfico, por que de ser así tú mismo serías la víctima de tus propios errores (siempre tomando la parte por el todo, ¡joder! eso sólo funciona en literatura).
Por cierto, tu propio seudónimo está mal puntuado: «El vocablo simple que forme parte, como primer elemento, de uno compuesto, no llevará el acento ortográfico que como simple le correspondería.» (Ortografía práctica de la Lengua Española, Luis Miranda Podadera).
Salud, camarada.