por Inés Zarza
Fotografía en contexto original: strongboli
Elegí ser negra en un mundo de blancos. Esto me hace frágil, pero me da perspectiva. Me dijeron que era un error. No les creí, pero aprendí a ser a veces blanca, a veces negra, y nunca complaciente con el sistema
En las largas y aburridas tardes de la infancia descubrí a mis dos grandes aliados: el tiempo y la literatura. De Cronos, me temo, aprendí la intransigencia. De las palabras, jugar a ser escritora
Pronto, comenzó la lucha entre ellos. El tiempo ganaba casi todas las partidas. Un libro, dos amantes, tres congresos. Un, dos, tres responda otra vez.
Compré un horóscopo-calendario para enjaular a mi ya declarado enemigo. Y descubrí el universo circular.
Hice buenos amigos, y conocí a algún hombre que intentó amar mis múltiples caras, aunque, al final, desertó. Las mujeres que queremos ser negras somos jodidas para los afectos.
Me adentré en la edad adulta casi sin darme cuenta. Y pacté con el sistema. Trabajé de traductora simultánea porque es una manera de decir mucho sin decir nada. Por las noches, volvía a recuperar mi piel de negra.
La maternidad siempre fue un gran deseo, una intuición. Un buen día, desperté en un apartamento distinto embarazada de un hombre que no me quería.
Desde entonces construyo un mundo en el que disfrazar la pena. Soy una madre que protege a su hijo sobre todo de sí misma.
Hoy, quisiera descansar de toda esta parafernalia. Sentarme en el horizonte de la vida observando a Cronos volar. Escribir por el placer de crear con las palabras, pero sin soberbia. Disfrutar, en espejos clementes, de todas las tonalidades de mi piel. Y hacer el amor en largas tardes de jubilada, hasta que suba la marea.
Quisiera dormir antes que los seres a quien di la vida y después de los que me la dieron a mí.
Quisiera ser ines, sin acento y con minúscula.
0 respuestas a «…sin acento y con minúscula»
Viva la mujer que quiere ser negra!!!
Ay, si todo el mundo entendiera nuestras metáforas de lo negro…
Somos los medios seres de Ramón.
(siempre me fijo en las conferencias de prensa en las traductoras sentaditas en sus cabinas, como mediums contemporáneas, y escribí un boceto de guión de cine donde una traductora se la liaba parda a su amante -el gran hombre al que estaba traduciendo- revelando sus miserias a los oyentes mientras él hablaba de lo listo que era ¡imagínate la escena!)
Me siento identificada en casi todo excepto en la primera palabra: «Elegí».
Yo nunca he tenido la sensación de haber elegido, sino de haber sido elegida sin remisión.
Las metáforas son así, no hay porqué entenderlas
creo que elegí porque recuerdo muy bien el momento en que lo hice, paseando con mis padres en el Muelle de las Areas y escuchandoles discutir sobre algo, era muy pequeña pero me parecían unos marcianos. Luego el tiempo ha ido dulcificando mi visión sobre las cosas y las personas de mi familia, aún con todo ahora la marciana soy yo en medio de toda esta burguesia vasca bienpensante.
Y por cierto Miguel estoy escribiendo un relato sobre una intérprete adicta al teléfono que tiene un ataque de pánico cuando descubre en cabina que se ha dejado el móvil en casa y no puede regresar a por el… más metáforas.
Gracias por los comentarios
Querida ines,
me identifico con tu escrito. También yo tengo la sensación de que algo o alguien eligió por mi. Yo creo que no lo hubiera hecho, a veces es demasiado doloroso.
No sigas disfrazando tu pena, sacúdetela ya de una vez. No te juzguez más, quierete. Deja de proteger a tu hijo de su madre. Le privarías de un ser extraordinario, con todo tu bueno y con todo tu malo.
Te invito a un baño bautismal en cuanto empiece a hacer temperatura para ello. elena no lleva acento, pero ya lo he empezado a escribir con minúscula.
Un abrazo
acepto el bautismal pero sin consejos, sólo el placer de flotar en el cantábrico una buena sesión inaugural de verano playero y un par de cañas
Ines
cuenta con ello ines
Querida Inés:
Me ha gustado mucho el autorretrato que te haces en 27 líneas pero eres muy severa contigo misma y no pienso nombrarte con minúsculas.
Una negra como tú, que encierra tal caudal de ternura y de sentimientos no tiene porqué disfrazarse sino todo lo contrario.
Por favor, sigue escribiendo así.
Escribe como lo haces ahora, bien sazonado de acentos y mejor con tu nombre en mayúsculas bien grandes ; así como del tamaño de tu corazón.
Inés, ines, incluso hines si quieres ahondar…. does not matter, mater dolorosa, crisol de tanto. Eres una mujer extraordinaria y una outsider de la orthographia, núcleo seminal de muchos predicados. Y así está bien. Así estás bien.
Aunque desertor, admirador.
¡¡Un abrazo!!
Y siempre tendrás ese folio o esa pantalla en la que mediante las palabras, podrás descansar de esa parafernalia… porque quizá por eso las elegiste, porque quizás te reconcilian con el mundo…
Sí… tener caracter impreso hace más jodidos los afectos, pero también más verdaderos, más incondicionales… más auténticos… o eso creo…
Espero que atardezcas acompañada de algún aspirante que se interese y entienda esas caras, sobre todo porque eso significará que aun hay vida inteligente y sensible al otro lado… y también espero que la naturaleza respete los ciclos de vida naturales y sosegados… para que no se alteren los sueños…
Me ha emocionado leerte.
Elegiste algo que no estaba en oferta,con lo cual,elegiste ser tu misma.
Fue un libro dos amantes y un congreso,como pudo haber sido
un paseo por la playa,un pescador y su barca..la vida te premió o te preñó de ese deseo…si todos protegiésemos a nuestros hijos de nosotros mismos,llegarían a se ellos mismos, mucho antes.
Un abrazo, your Highness, – alias Ines –