Por Manumitida
Algunas mañanas me levanto con ganas de frotar las tetas contra algo,
ofrecer mi grupa y someterme a alguien más grande y más fuerte que yo.
En esos días mi cuerpo exhala un continuo olor que me calienta la nariz y que calentaría a cualquier hombre que se acercase un poco, mis ojos brillan peligrosos y mis labios se curvan en una insinuante sonrisa.
Hoy voy dejando a mi paso una estela que cualquier animal menos desarrollado que el hombre podría seguir. Pero el hombre, en su desquiciado afán, ya no tiene tiempo de seguir un olor, de ejercitar el arte de la conquista, de llenar de hombre a una mujer.
Qué desperdicio tan grande.
0 respuestas a «Insatisfacción»
A lo peor, a pesar de que uno detecte con nitidez tu aroma de hembra receptiva, no le baste con ser hombre, más grande y más fuerte que tú, para frotarse con tus tetas y subir a tu grupa. A lo peor, aunque se domine el arte de la conquista y se disponga del tiempo necesario, no esté uno dispuesto a arriesgarse a perderlo, siguiendo pistas falsas una vez más. A lo peor, no está uno por la labor de pasar de nuevo el casting habitual para que le recuerden que, como la mayoría de los mortales, uno no es tan guapo, ni tan joven, ni tiene tanto dinero como David Beckham.
A lo peor uno es lo suficientemente hombre como para llenarte, pero sólo desearía hacerlo algunas de esas noches que perfumas el aire de deseo …
A lo mejor es que no me he cruzado nunca con tu rastro…hasta hoy
Ese celo ocasional puede ser disuasorio. Y ese hoy te ordeno que me sometas, también. En todo caso, no desesperes, hay mucho cubanito por ahí.